Hoy toca hablar de un indie lanzado hace dos años por un pequeño estudio debutante de Estados Unidos: Oxenfree. Sus creadores lo definieron acertadamente como una mezcla entre Limbo y The Walking Dead, y entre sus influencias se hallan míticas películas de aventuras de los 80 protagonizadas por adolescentes, como Los Goonies o Stand By Me. La historia de Alex, Ren, Clarissa y sus amigos tiene elementos sobrenaturales, muchos diálogos, un precioso estilo visual, una magnífica banda sonora y una radio que podemos usar en todo momento.
También hablamos sobre una gran noticia anunciada la semana pasada en la GDC de San Francisco: la creación del primer sindicato de creadores de videojuegos en Estados Unidos. Game Workers Unite defenderá los derechos de los trabajadores, para mejorar sus condiciones laborales y hará frente a las malvadas empresas gigantes que todos conocemos.