De nuevo se han vestido de morado las calles de Euskal Herria. El pasado martes fueron numerosas las manifestaciones convocadas por colectivos feministas en las ciudades y pueblos de toda Euskal Herria, siendo muy numerosas las principales marchas por las capitales.. Además, se han organizado manifestaciones y otras actividades en otras localidades. En Bilbo se reclamó un «sistema de cuidados público, universal y de calidad» y se reafirmó el movimiento feminista como «fuerza de cambio y lucha».
Bilbao Feminista Saretzen (BFS) ha exigido «un cambio estructural que dé la importancia que merece» al cuidado y «reordene las prioridades sociopolíticas y económicas». Una revolución a la que han puesto dos pilares: ser público y dignificar las condiciones de las cuidadoras. «Pedimos un sistema de cuidados sin subcontratación fuera de la lógica del mercado. También pedimos reconocimiento político, social y laboral para las mujeres migradas que sustentan su vida en condiciones de esclavitud», señalaron. Para ello, han destacado la necesidad de «fortalecer» a los colectivos feministas y han llamado a las mujeres a organizarse en ellos.
Para entender la dimensión de esta cita entrevistamos a Itziar Azpeitia, del colectivo Lanbroa y portavoz de la coordinadora Bilbo Feminista Saretzen que este año ha llamado a movilizarse bajo el lema ‘Antolakuntza feministaz zaintza publikoa borrokatu’ (Luchas por unos cuidados públicos desde la organizacion feminista)